Las pastas son un plato amado en todo el mundo, pero también se les atribuye el aumento de peso. Sin embargo, ¿es la harina la verdadera culpable? Una especialista en alimentación revela un truco para disfrutar de las pastas sin preocuparse por la báscula.
El truco para comer para comer pastas y no engordar
Alejandra Chacón, experta en alimentación y también Ingeniera Agrónoma, comparte un consejo sorprendente: antes de cocinar las pastas, guárdalas en la heladera durante toda la noche.
Este simple paso transforma el almidón de la pasta en almidón resistente, reduciendo la cantidad de carbohidratos y haciendo que el plato sea más nutritivo.
Además, Chacón enfatizó la importancia de agregar verduras a las pastas. Al hacerlo, aumentamos la cantidad de fibras y vitaminas en el plato, convirtiéndolo en una opción aún más saludable.
Desmitificando el impacto de las pastas en el peso
Contrariamente a la creencia popular, la pasta en sí misma no es la culpable del aumento de peso. Según Mejor con Salud, son los acompañamientos como salsas y queso los que contribuyen a las calorías adicionales.
"La pasta no engorda por sus ingredientes, sino por sus acompañamientos", señalan. Por lo tanto, la moderación en el consumo de estos complementos es clave para disfrutar de las pastas de manera saludable.
Datos nutricionales de las pastas
De acuerdo con Consumer, la pasta está compuesta principalmente por hidratos de carbono (82%), seguidos de proteínas (14%) y grasas (1% - 2%). Un plato de pasta con salsa de tomate aporta aproximadamente 400 kilocalorías, lo que representa alrededor del 20% de las necesidades calóricas diarias de una persona promedio.